Tan solo para comenzar, el arranque de esta biografía novelada de Belmonte, por Cháves Nogales, editada por Asteroide, una joya:
“Juan es un niño atónito, que cuando asoma por las tardes al portal de su casa con el babadero recosido y limpio, llevando en las manecitas la onza de chocolate y el canto de pan moreno que le han dado para merendar y contempla el abigarrado aspecto de la calle desde la penumbra del zaguán, se siente sobrecogido por el espectáculo del mundo, y se queda allí un mmomento asustado, sin decidirsee a saltar al arroyo…”